Repostar hidrógeno: ¿Cómo se recarga un coche de pila de combustible?

Ni tan rápido como repostar gasolina ni tan lento como recargar un coche eléctrico al 100%, repostar un coche de hidrógeno es más sencillo de lo que parece, pero hay cierta información clave que debemos conocer para no tardar más de la cuenta y hacerlo con total seguridad. Aquí vamos a repasar esas claves.

El proceso de recarga de un coche de hidrógeno como el Hyundai Nexo es más fácil de lo que parece. Para empezar en la estación de carga de hidrógeno nos podremos encontrar dos mangueras para repostar, cuya presión de recarga varía, y por lo tanto también la cantidad de hidrógeno que podremos repostar. La de 350 bares llenará los depósitos del Nexo a la mitad aproximadamente, las de 700 bares podrán llenarlo por completo.

En ambos casos, las mangueras de recarga tienen una boquilla con un cierre de seguridad. Este evitará que la manguera se libere o haya fugas del hidrógeno durante el proceso de recarga, y es que este pasa en estado líquido al depósito del vehículo. Para repostar solo tenemos que enchufar la manguera y activar el seguro, apretar el botón de inicio de recarga del surtidor de la hidrogenera y esperar a que este acabe. Solo entonces podremos quitar el seguro y desenchufar la manguera del vehículo. En caso de emergencia hay un botón de parada automática en el surtidor.

La ventaja del hidrógeno como combustible y en su repostaje es que no mancha ni genera residuos, además de que al consumirlo el vehículo no genera ningún gas nocivo y el rendimiento del motor es prácticamente idéntico al de un vehículo de combustión.

Al igual que en una gasolinera, en una estación de carga de hidrógeno debemos evitar el uso del móvil y por supuesto fumar en el recinto, ya que el hidrógeno es altamente inflamable.

Siempre debemos seguir las instrucciones del punto de recarga, esperar los tiempos establecidos y no intentar activar el surtidor si no está bien conectada la boquilla o no se ha cerrado herméticamente. Por supuesto, ante cualquier problema debemos hacer uso del botón de apagado de emergencia presente en el surtidor, normalmente cerca del botón de inicio de recarga.

El hidrógeno es difícil de producirse o almacenarse, por lo que solo se podrá repostar en hidrogeneras, estaciones específicas para su almacenaje, compresión y posterior suministro.

Actualmente hay 11 hidrogeneras en España para poder recargar un coche de hidrógeno, y aunque todas ellas son privadas, se puede solicitar una cita para recargar. Esta cifra crecerá gracias a planes de entidades como Naturgy, que para 2025 han establecido un plan de creación de puntos de recarga que contará con hasta 38 estaciones de servicio de repostaje de hidrógeno.

Como ocurre con los tiempos de carga, el precio del kilo de hidrógeno está a medio camino entre el precio del litro de combustible y el del kW para el coche eléctrico. A medida que la red de carga de hidrógeno crezca y esta tecnología se desarrolle, el precio se reducirá y los costes por kilómetro serán mucho más bajos.

La media del precio de un kilo de hidrógeno en Europa ronda entre los 8 y 10 euros, aunque puede variar, partiendo desde los 4 euros incluso. Teniendo en cuenta que el Hyundai Nexo tiene entre sus depósitos un total de casi 157 litros, unos 6,7 kilos, recargarlo no costaría más de 60 euros.

Dado que nosotros no podemos controlar al 100% la cantidad de hidrógeno que entra al vehículo, es este en comunicación con la estación de carga de hidrógeno el que decide cuanto tiempo necesita para llenarse. Normalmente, para llenar un tanque de hidrógeno se requieren unos cinco minutos aproximadamente, según con cuanta carga lleguemos.

En un coche de hidrógeno como por ejemplo el Hyundai Nexo, el consumo ronda los 10 litros, que homologa según ciclo WLTP 666 km de autonomía con una sola carga al 100%, que por supuesto será mayor si solo se conduce en ciudad.